Me han encantado vuestras fotos

! ¡¡¡Pero no es ninguno de esos!!!
Este faro pertenece al Peugeot Quasar.
Junto al Proxima y al Oxia, el Peugeot Quasar conforma un trío de auténticas bellezas ochenteras, representando a la perfección el canon estético de belleza futurista del que poco o nada terminó plasmado en las calles.
Con el Salón de París de 1984 como escenario, fórmula habitual en los concept de la marca, el Peugeot Quasar destacaba por su futurista estampa.
Su parrilla laminada quedaba acompañada por ópticas de diseño alargado en disposición horizontal, destacando su techo en burbuja, sus puertas de apertura vertical o el integrado alerón posterior, dejando entre este y la cabina una “bañera” dispuesta a acoger la mecánica de este concept, al descubierto.
Pero si futurista era su estampa exterior, su interior quedaba a la altura de “Tron”. Una enorme instrumentación totalmente digital de colores amarillo y naranja contrastando con el fondo azul, un sistema de navegación (recordemos que estamos en 1984 y que el primer GPS digital de producción no llegaría hasta los 90), un sistema de sonido firmado por Clarion y todo ello en una atmósfera roja a mitad de camino entre un lujo futurista más propio del cine y un coche deportivo.
Mecánicamente nos encontramos con un interesante conjunto con una arquitectura heredada del Peugeot 205 T16, contando con suspensiones de doble horquilla y un sistema de tracción total con diferencial central. Su bloque, en disposición central,era un 4 cilindros de 1.6 litros doble turbo con una potencia de 597 caballos.
Sobre las llantas de 16 pulgadas en diseño de turbina el Quasar montaba neumáticos Michelin.
¡Espero que os haya gustado!
